Ceramidas: Son lípidos que existen naturalmente en la piel y son esenciales para mantener su función de barrera y retener la humedad. Sin ceramidas, la piel se seca e irrita, por lo que es necesario aplicar ceramidas en la piel para que vuelva a estar sana y protegida.
Manteca de karité: Es un excelente hidratante, muy rico en ácidos grasos y antioxidantes. Mantiene la piel nutrida y protegida.
Aceite de almendras dulces: Es un aceite con un dulce aroma natural que suaviza, calma e hidrata la piel, mejorando su textura.
Aqua, caprilato de coco, parafina líquida, glicerina, dimeticona, poligliceril-6-estearato, mantequilla de Butyrospermum Parkii, triisostearina, cetilfosfato de potasio, estearato de glicerilo, aceite de Prunus Amygdalus Dulcis, aceite de semilla de Gossypium Herbaceum, pantenol, betaína, ceramida Np, ceramida Ap, ceramida Eop, fitoesfingosina, colesterol, alcohol araquidílico, alcohol behenial, glucósido araquidílico, carbómero, goma xantana, extracto de semilla de Linum Usitatissimum, alcohol fenetílico, ácido cítrico, fenoxietanol, caprilil glicol, lactilato de lauroil sódico, pentaeritritil tetra-di-T- Butil hidroxihidrocinamato, Edta, poligliceril-6 behenato, etilhexilglicerina, hidróxido de sodio.
